En fase de aprendizaje o modificación de conducta, si has de utilizar refuerzos positivos en forma de comida, que sean de calidad: queso, salchichas, hígado tostado… El alto valor del refuerzo favorecerá el rápido aprendizaje. Si se utilizan refuerzos de bajo nivel o poco apetitosos, es posible que no haya progresos.
Es importante que el refuerzo positivo se aplique como premio al éxito o progresión del ejercicio. Si premiamos constantemente y sin sentido, ese refuerzo dejará de tener tanto valor.
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