No podemos tratar de tener perros perfectos siendo tan imperfectos, sería un error pretenderlo.
Aceptemos sus virtudes y sus defectos, ellos siempre nos los aceptan y nos los perdonan.
Y dicho esto… chicos, no pretendo que seáis perfectos, porque para mí ya lo sois y todos los días me lo demostráis, cada uno a vuestra manera.
Troy, Brandy & Honey