Castigar la sobreexcitación del perro

mawasi

Sale de un portal un propietario con su perro, tipo labrador, muy excitado y nada más pisar la calle le empieza a tirar fuertemente de la correa para que se frene, supongo que con el «objetivo» de bajar la excitación del perro. La correa es mínima (30 o 40 cm), así que el perro ha de tirar sí o sí, si quiere oler el suelo de la calle que acaba de pisar.

A los pocos metros, su dueño le suelta en un parque y se dedica a excitar constantemente al perro haciendo ruidos con la grava, diciéndole cosas y lanzándole un objeto, en el tiempo que tardo en rodear el parque con mis perros que también miraban y se ponían alerta y excitados al escuchar el jaleo.

[…] Y esto, es otra de las tónicas habituales que podemos observar en la convivencia con perros: sobreexcitar a los perros que ya de por sí pueden estar muy excitados y luego querer bajar esa excitación mediante la fuerza o la actividad física.

Dirán «¡es que el perro tira y me va a dislocar el hombro o me va a caer!» y por eso le dan tirones, castigan, gritan, recurren a collares de ahogo, pinchos, a correas cortas y a cansar y cansar al perro mediante lanzamientos de pelotas para hacerlo aún más fuerte y que tire más ¿no?

Pero pocos se plantearán bajar la excitación de un perro excitado ofreciéndole juegos tranquilos, paseos tranquilos, caricias tranquilas, hablándole en un tono amable, sin dar sensacion de enfado, siendo mucho más previsibles para el perro, al fin y al cabo, dejando al perro ser más perro… y disfrutar así de un perro equilibrado, un gran compañero, sin la necesidad de estar todo el día batallando con él.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies
A %d blogueros les gusta esto: