Leonardo Da Vinci realizó muchos estudios y pinturas donde aparece la figura del gato.
Se dice que Leonardo tenía mucho aprecio por los animales. Sus contemporáneos cuentan que le gustaba ir a los mercados y comprar cantidad de pajarillos en jaulas para soltarlos y devolverles la libertad una vez fuera de la ciudad. Su casa estaba llena de perros y de gatos. Han llegado hasta nosotros numerosos dibujos en los cuales representa a estos animales saltando o dando vueltas. Leonardo evitó, al menos en su vejez, comer carne.